domingo, 21 de diciembre de 2014

ALBACETE. NAVAJAS Y COSMÉTICA DE VANGUARDIA


Tan de vanguardia, que casi no aguanto hasta llegar a casa y me meto en el baño del hotel Urso, cual yonki, a clavarme la "jeringuilla" y comprobar los efectos. Pero los de PBSerum me debieron leer la mente y me invitaron a pasar a la suite a probar el nuevo tratamiento en condiciones. Empiezo desde el principio...

Hacía mucho tiempo que no me fijaba en la acera de los pares de mi querida calle Mejía Lequerica. Digo querida porque la que maneja mis hilos se pasó los 8 primeros años de profesión en el nº 12. 
Y no por no pasar a menudo, que es mi barrio. Desde que quitaron por fin el "museo de la grúa" y la abrieron... anda que no me habré detenido veces a mirar el nuevo mercado de Barceló intentando decidir si me espeluzna, me horroriza o me hace un poco de gracia. 
Y tanto mirar hacia el mercado, que de repente han abierto enfrente un hotelazo con encanto -jardín vertical incluido- de 5 estrellas y yo sin enterarme. Se llama Urso y espero que organicen allí muchas más presentaciones... 

Lo pudimos "estrenar" gracias a la firma PBSerum y a su último lanzamiento. ¡El lanzamiento! 
Vaya por delante que la cosmética natural, eco y tal es mucho más mona, cuca, y respetuosa con el medio-ambiente... pero yo, para mi piel, siempre reclamo la última molécula, gestada en un laboratorio high tech como Dios manda, por señores de bata blanca y no jardineros recolectores. Donde esté la biotecnología...





En cuanto vi el formato del envase, la rodilla me empezó a temblar: una pastilla liofilizada dentro de un tarrito médico monodosis y con una jeringuilla -sin aguja, pero de máxima precisión- para aplicarlo de inmediato antes de que perdiera sus propiedades. Ufff. Palabras mayores. 

Me quedé algo descolocada cuando nos explicaron que todo aquello, desde el desarrollo de la idea hasta el packaging y cada ingrediente se producía en Albacete. ¡Quién nos lo iba a decir! después de tantas visitas guiadas por los laboratorios más avanzados de Europa y parte del extranjero. 

Pero al lío. La cuestión es que a medida que nos explicaban los ingredientes y su alta concentración (casi rozando la ilegalidad, como a mí me gusta) me fui emocionando: 

DMAE al 5%. Un viejo y querido conocido que aumenta la contracción de los músculos y posee un potente efecto reafirmante. 
Vitamina C Pura ¡al 20%!. Un chute de firmeza, elasticidad y protección en una sola dosis.
Colagenasa. Una molécula que estimula la producción de nuevo colágeno. Lo que todas necesitamos a a partir de los 35, año arriba año abajo.
Queratinasa. Una generosa enzima que incrementa hasta 4 veces la penetración de los activos anteriores. 
Esta sí llega al interior de la epidermis, que lo sé yo...

Me fío poco de las opiniones subjetivas de las consumidoras (tan agradecidas de que les regalen un tratamiento por el morro que suelen puntuar de 9 para arriba todos los parámetros por los que les preguntan), pero los efectos del PBSerum Firmness Complex ha sido controlados por estudio por dermatólogos independientes a los que conozco bien. 
En 14 días, el nivel de firmeza de la piel aumenta un 25%.
Cuando lo probamos sobre la mano y descubrí lo mal que olía (todo hay que decirlo) me convencí de que aquello era un cosmecéutico concentrado a lo bestia, sin conservantes ni perfumes, ni colorantes. 

Esta noche me he reservado un hueco para desenfundar las armas y reducir a las arrugas más rebeldes. Aún no se ha cumplido la semana que recomiendan entre sesión y sesión, pero como Criaturita 1 siga por el camino que ha tomado, la arruga del entrecejo termina en hachazo. 
No será lo mismo... Las chicas de Just Like Heaven (la agencia responsable de la comunicación) tuvieron el detalle de subirme a la suite para que lo probara "en camilla" a través de los certeros movimientos de una masajista. Pero sé cómo extenderla e igual hasta convenzo a Criaturita 2 para que me toque con armonía los pies (que le encanta) mientras me la pongo.

El tratamiento solo se vende en centros de estética. 
Más información en www.pbserum.com

lunes, 15 de diciembre de 2014

QUE PENA NO SER STRIPPER...




O actriz porno, o la señora del cuadro "El origen del mundo" de Courbet. Es que he descubierto una mascarilla para las zonas íntimas con la que estoy entusiasmada. La pena es que yo, creyente mucho, pero practicante de "aquello", pues no demasiado la verdad.

Puede que haya sido la primera vez en la vida que me ha dado rabia llegar tarde a una presentación de belleza. Según entré en las oficinas de Balaguer Comunicación en Madrid noté que me había perdido algo importante. Las compañeras no hacían más que cuchichear y asaltar a preguntas a 
mi querida Teresa de la Cierva, autora del reconocido -con premio y todo- y genial blog de ABC La Polvera. Ella actuaba como maestra de ceremonias, desde su experiencia, para descubrirnos el universo de belleza  www.ikonsgallery.com. Y por lo visto, acababa de explicar su experiencia con algo que a primera vista parecía una salva-slip al uso. 






Andaba yo muy desencaminada. Pero como no soy de las que rompen el ritmo de la presentación preguntando cosas que de haber llegado antes, entendería, controlé mi curiosidad y al final del acto, le pregunté a directamente a Rebeca Cirujano, beauty hunter de la firma (una web en la que se pueden comprar los productos más cucos, vanguardias y originales del universo beauty) en qué consistía aquello.
Su nombre oficial es Mirage 24 Intimate Mask, y es una invención de la firma francesa Bioxidea.
¡Una mascarilla íntima de belleza! Sí, de efecto tensor, reafirmante y anti-edad para quitar de un plumazo unos cuantos años a la vagina. 
Yo no sé cuántos aparenta la mía. No es cuestión de preguntar "¿cuántos años le echas?" cuando se comparten intimidades... pero a juzgar por el estado del cuello y las manos, y los dos partos naturales que he tenido, fijo que al menos alguno más de los que debería. 
Teresa parecía bastante animada. A mí, me daba como cierto repelús por el aspecto frío de su textura gelificante... pero en cuanto la presidenta de mi Comunidad de Vecinos se dignó a poner la calefacción central, me lancé a probarla.

En el fondo, lleva los mismos ingredientes que podría llevar una mascarilla facial de las buenas
Extracto de granada. Encargado de mantener los niveles de hidratación y luchar contra los radicales libres.
Acetil Hexapéptido-8. Un activo que relaja la tensión de la piel produciendo una reducción de las líneas finas y las arrugas superficiales. 
Ácido cítrico. Para eliminar las células muertas (en mi caso, probablemente de aburrimiento), y  homogeneizar el tono.
Arginina. Actúa en la síntesis de colágeno y acelera el proceso de restauración de la piel. 

Aunque lo ideal es aplicarla sin ropa interior y dejarla actuar mientras descansas y te relajas durante 15 o 30 minutos, con las criaturitas pululando alrededor, la cubrí con una bragas de las de andar por casa.

Me quedan dos. En la caja vienen 3 (por 45 euros)... Pero ahora, vistos los resultados, ya si que me las reservo...el efecto de lifting se nota y la zona queda como más recogidita y tersa.
Top Secret: Courtney Love es adicta y probablemente tenga más unidades de Mirage 24 en su casa que rollos de papel de cocina.



miércoles, 10 de diciembre de 2014

ESTOY BALITA...




Muy malita, y odio estar malita. La fiebre me duele, el pelo también, no dejo de gotear y la cabeza es como una olla a presión desde hace cinco días. 




Antes me encantaba estar unos días malita. Cuando era hija, claro. Que me quedaba en la cama a vivir como una reina y mi madre me subía hasta el Ragazza. También cuando era medio-ennominada-, y alguien de la redacción se encargaba de los marrones que dejabas a medias.

Pero de free-lance y de madre de criaturitas... ponerse mala es lo peor. Hay que hacer lo mismo, pero con 39 de fiebre. Deberes con niña, gritos al niño con la poca voz que tienes y las anginas como pelotas de tenis, entregas, entrevistas telefónicas en inglés, contestar mails...
De lo único que me "libro" -y porque el médico no me deja salir de casa- es de las presentaciones.
Por lo general, siempre te pones mala en el peor momento. En pleno Especial de Navidad, de cierre, con exámenes finales o en la semana de festejos y folklore del colegio. Pero claro, bajan las defensas y ¡ahí te pillo! Muchos no se creen lo mala que estoy porque -aunque gangosa y llorosa- no descuido la imagen personal.
Mi teoría de que si te pillan con el pelo rizado las cosas (regla, migraña...) te duelen más, la extiendo a gripes y catarros y junto con mi arsenal médico, siempre preparo en la mesilla de noche un kit de belleza de emergencia para fiebres.

El médico es bastante básico. Como soy alérgica a casi todo (incluida aspirina, antiinflamatorios y el 90% de los antibióticos) se reduce a la nebulicina para poder respirar. No puedo vivir sin ella: lo primero que hice con mi primer sueldo fue comprarme siete frascos, que en casa me la racionaban; paracetamol de 1 gramo y Flumil Forte para ablandar las toses. 

El kit de belleza me acompaña desde que descubrí que si te miras al espejo y no tienes cara de enferma te curas antes, es algo más extenso. Sus figurantes principales han variado poco en los últimos años, aunque hay alguna incorporación novedosa.

1. El Bálsamo Reparación Inmediata Nariz y Labios de Neutrogena. Si os pasa como a mí, que en la vida -ni en los semáforos- se me ocurre comprar kleenex, y termináis recurriendo al papel de cocina, servilletas y demás genéricos es vital. Sobre todo, para no hacer costra encima del labio y ver las estrellas cada vez que hay que sonarse.

2. La BB Cream NudeTan de Dior. Desde hace dos años es mi favorita. Me quita al momento el tono mortecino y no hace raya con el cuello. 

3. El champú seco Fructis de Garnier. Benditos sean él y todos sus compañeros. Porque una a veces no está para andar con el pelo mojado y en mi cuarto de baño aún no hay calefacción. Inciso: en circunstancias normales, me lavo el pelo día sí día no.

4. El colorete Orgasm de Nars. Un toque en las mejillas y como si viniera de correr en libertad.

5. La plancha alisadora GHD. Después de resistirme durante años pensando que era igual que todas pero mucho más cara, el estado de mis puntas me ha terminado de convencer. ¿Rizo amenazante?, ahí va ella, para demostrar quien manda.

6. Color Elixir (tono signature scarlet) de Maybelline. Yo es que con los labios pintados de rojo soy capaz de todo. Hasta de subirme a colgar adornos de Navidad mientras fibrilo. Y este además dura, nutre y brilla que parece un bálsamo.

7. Y aunque no sea su función propiamente dicha. Me he enganchado en este encierro a los cubitos Eye Express Radiance Ice Cube de Elixir de Anne Semonin. Se meten en la nevera y deshinchan los ojos y hasta me da la sensación de que bajan la fiebre. A la venta en www.ikonsgallery.com. No hay ni que salir de casa para conseguirlos, 


martes, 2 de diciembre de 2014

CHAMPÚ DE CEBOLLA


¿CHAMPÚ DE CABALLO? NOOO, MEJOR DE CEBOLLA

Vaya por delante que a mi me encanta la cebolla.
Si no lleva cebolla caramelizada, no es mi ensalada. He sobrevivido a las dietas más draconianas –y aburridas- colándola en casi todos mis platos. Me vuelve loca la sopa de cebolla y uno de mis poemas favoritos son las “Nanas de la cebolla” de Miguel Hernández... no os digo más.

Me pongo nerviosa cuando quedan menos de dos en la nevera.
Salvo la tortilla, que la prefiero sin (me sale el lado pureta)… me gusta hasta picar cebolla.
Lagrimeo tan a gusto. Aprovecho para llorar por las cosas por las que no pude llorar y aprovecho también, a fondo perdido, para llorar por cosas por las que aguantaré el llanto cuando llegue el momento.
Catarsis sobre una tabla de madera en la cocina que me dejan renovada.
Os pongo en situación, y abro las puertas de mi cocina, para que entendáis lo que sentí ayer cuando me encontré en la bandeja de entrada un mail con asunto “champú de cebolla”





Sí, de cebolla. Tuve que releer para constatar que no era una errata tipográfica entre vocales y se referían al famoso champú de caballo. Pero no.

Por lo visto, es súper eficaz a la hora de estimular el crecimiento, y viene avalado por el mismísimo médico griego Dioscórides, que ya en el siglo I, en su libro “Materia médica” hacía referencia a las propiedades de esta planta como tratamiento para el cabello. Muchos siglos después, en el año 1597, el herborista inglés John Gerard decía que “el jugo de cebolla untado sobre la calva al sol, devuelve al pelo rápidamente”. Obviamente no hay documento fotográfico que lo atestigüe, pero cuando el río suena…

La clave, según Nuggela & Sulé –la firma cosmética que tiene el honor de haber formulado el primer champú con extracto de cebolla- radica en su composición, rica en Quercitina y Azufre. Las propiedades de la primera son para tenerlas muy en cuenta: reduce la inflamación del cuero cabelludo y estimula el riego sanguíneo y nutre. El azufre, por su parte, presume de un gran poder antiséptico que elimina residuos asegurando una limpieza eficaz durante más tiempo.

No tiene parabenes y lo puedes encontrar farmacias, herbolarios o en la web www.nuggelasule.com por 29 euos.

¿El único pero? que no deja olor a cebolla... que a mí no me importaría nada de nada.